¿Ya les conté que soy fan de los aceites esenciales? Pues sí. Comencé a utilizarlos hace como 10 años, los primeros que conocí fueron los de Just. Como buena ñoña, cada que escucho un término nuevo, me sumerjo en internet para buscar todo sobre el tema, sumado a que siempre me ha encantado todo lo alternativo, mágico y espiritual, y esa fue la primera marca que se me cruzó en el camino.
Comencé con los básicos, como lavanda, menta y limón, y algunas cremas para época de frío, pero la verdad es que más que uso terapéutico me servían para aromaterapia.
Después probé DoTerra. También muy buenos y ahí fue cuando empecé a experimentar más mezclas, comencé a preparar botellitas con combinaciones especiales para mis hijos y me enamoré, pero hace poco llegaron a mí los aceites de YoungLiving y fue amor a primera vista. Además de su pureza, me encantó que tienen muchísimas combinaciones. Pedí mi kit y desde que lo recibí, fue una súper experiencia olfativa y a la vista, pues viene en una cajita súper cute.
A los pocos días, me dio una infección horrible de garganta y antes de recurrir a los medicamentos, decidí abrirme a una opción que estaba completamente cerrada, ingerirlos. Así que preparé un té con varios de ellos y una cucharada de miel, además de una especie de enjuague bucal, me llené de aceites de pies a cabeza y, para mi sorpresa, me ayudaron muchísimo. En tres días ya estaba como nueva.
Desde ese momento, mi kit ha crecido y crecido, pues he encontrado diferentes usos y se los comparto por si les sirve:
* Meditación. Son una maravilla, pues además de que crean un ambiente relajante, según la mezcla o aceite que utilices, el espacio se impregna de un delicioso aroma que facilita la concentración, ayuda a liberar emociones y tensiones. Para ello, les recomiendo la mezcla Believe, Joy o Stress away.
* Subir defensas. Ya empieza la época en que todo mundo nos enfermamos, por ello siempre recomiendo aumentar ingesta de frutas con vitamina C, cúrcuma y el aceite básico, Thieves. Todas las noches se las pongo a mis hijos en la planta de los pies y columna, es como una vacuna natural y preventiva.
* Cocina. Ahora que estuve en entrega de proyectos finales de mi diplomado Plant Based Chef, tuve que probar con diferentes ingredientes y especias, pero algunas de ellas no las tenía en casa y me daba cuenta en la noche, cuando ya tenía todo listo para preparar, por lo que recurrí a algunos aceites que tenía y no saben qué delicia de resultados. Por ejemplo, cuando una receta indica “ralladura de limón o naranja”, puedes sustituir por 5-10 gotitas de aceite de naranja y queda perfecto.
* Tensión. Como me encanta estar en mil cosas a la vez, a veces enloquezco, así que en mi bolsa nunca puede faltar el aceite Stress Away, que viene en el kit de inicio. Lo que hice fue ponerle un aplicador roll on en vez de la tapa y listo. Cada que estoy a dos de explotar, me lo pongo en muñecas, sienes y nuca para relajarme. Es impresionante su acción, pues en menos de 2 minutos, los aceites pasan al torrente sanguíneo y obtienes los beneficios del mismo.