Últimamente quizá has escuchado mucho hablar del ghee y se debe a sus múltiples beneficios a la salud. Y, aunque no es algo nuevo, pues se utiliza desde hace siglos en la cocina India, porque no se derrite en climas cálidos, y en la medicina ayurvédica, recientemente se ha compartido más información sobre este ingrediente.
Se trata de mantequilla clarificada que es calentada a muy baja temperatura y lentamente, hasta que los sólidos de la leche se separan del líquido, se asientan y eliminan, a diferencia de la mantequilla, que buscan que esos sólidos lácteos no se quemen. Este proceso hace que el ghee tenga una pureza superior.
Su sabor es ligeramente similar al de la nuez, lo cual es perfecto para darle un toque especial a los platillos salados o dulces.
Propiedades y beneficios
- Tiene un punto de quema más alto que la mantequilla, por lo que no se quema ni humea tan rápido como ésta última, lo que lo hace una excelente alternativa para tostar, dorar o saltear un alimento.
- Tiene una vida mucho mayor que la mantequilla, pues puede durar alrededor de seis meses en el refrigerador e, incluso, se puede mantener a temperatura ambiente para hacerlo más fácil de untar. En este caso, puede durar como 4 meses, aproximadamente, en un ambiente libre de humedad.
- Contiene ácidos grasos de cadena media, que son más fáciles de digerir, incluso para los sensibles a la lactosa, y ácido butírico que ayuda al sistema inmunológico y tiene propiedades antiinflamatorias, y grasas saludables que ayudan a reducir el apetito y estimular el proceso cognitivo.
- De acuerdo con Authority Nutrition, el ghee es libre de azúcar (lactosa presente en la leche), lo cual lo hace más saludable. Y, además, contiene mayor cantidad de ácido linoleico conjugado (CLA) una grasa poliinsaturada que induce la pérdida de grasa.